Agentes de policía y guardia civil de la zona de San Cristobel de La Laguna de Tenerife, la mayor de las Islas Canarias españolas, encontraron a los perros en una cueva de un barranco cerca de la localidad de Tabaida.
Sus rescatistas los llevaron al refugio de animales Albergue Comarcal Valle Colino, y un portavoz dijo que los perros vivían en el “infierno”.
Tres de los cinco perros tenían microchips y estaban al sol sin comida ni agua.
Los medios locales dijeron que los perros eran propiedad de un cazador y un portavoz del refugio añadió que se había presentado una denuncia ante las autoridades locales.
Imágenes horribles muestran a uno de los perros mirando a sus rescatadores a través de una valla metálica, con las orejas cargadas de garrapatas.
Otra imagen muestra el interior de la oreja de otro perro lleno de criaturas chupadoras de sangre.
Todas las imágenes mostraban a los perros con las costillas y los huesos de las patas claramente visibles.
Los perros continúan siendo tratados en el refugio y los veterinarios esperan que recuperen su plena salud en unos tres meses antes de ser dados en adopción.
No está claro si el cazador ha sido arrestado por maltrato animal.
La gente en las redes sociales quedó horrorizada con las imágenes.
Uno dijo: “Oh, Dios mío”. Al menos hubo un final feliz. No sé cómo la gente puede dormir cuando tienen animales en esas condiciones. Merece ir a prisión”.
Otro añadió: “Gracias a las personas amables y compasivas que ayudaron a rescatar a estos cinco animales inocentes de su infierno”.